Una semana y media retirada, no por placer sino por obligación. En mi empeño por conocer Polonia a fondo esta vez le ha tocado el turno a las Urgencias. Coger un vaso, a veces, es una tarea peligrosa y si estalla en mil pedazos clavándote el único trozo grande aún más. Mucha sangre, muchos cristales y un trozo de piel y carne despegada, ese es el resultado de mi hazaña, con sus consiguientes 8 puntos en la palma y 4 en el dedo. Nos acompañó un amigo de Yey, sino ya verías el panorama en el hospital para contar la escena, un bordado muy chulo, mano vendada y a volver el lunes porque no saben si se pegará la piel por el tipo de corte que es. Toda la noche con el brazo en alto para que se corte la hemorragia, hermosa postura para dormir, y un ligero molesto dolor. El domingo día de reflexión ya que tengo que seguir con el brazo arriba(me siento estúpida), Llega el lunes, menos mal que me acompañan Yey y Katia, la traductora, porque al llegar al ambulatorio menudo lío, primero que me dan cita para dentro de un mes (eh??) y luego a esperar a que pasen todos y me atienden, repito, gracias a Katia que se cuela en la consulta como Pedro por su casa. Dolor infernal, la gasa está pegada y tiran como si no pasara nada ( aquí son brutos con coj....), me puse histérica, es un hospital universitario y me veo rodeada por 5 estudiantes, 2 enfermeras y el médico, todos riéndose y hablando polaco, claro. No sabían bien a quién trataban y la furia gallega se dejó asomar un poco, la verdad es que muy poco, pero en fin estaba en sus manos y mejor dejarlo así. Les preocupa porque hay sangre coagulada debajo y no saben si habrá que cortar la piel ( ni de coña!!!)me dicen que vuelva en 2 días. Y así hago, esta vez es otro médico y no hay estudiantes, en cuanto me ven sentada fuera, les cambia la cara, esta vez estoy sola, pero al final el inglés ayuda al entendimiento. Buenas noticias!! el lunes me quitan los puntos, menos mal, esta semana es un coñazo, no puedo hacer nada porque me duele la mano y como no la puedo mojar ni nada estoy en casa aburrida comiéndome un libro, encima el frío de la calle no ayuda y ya ni paseo, ni voy al Carmen ni na de na.
Algo bueno sí pasó, fue nuestro aniversario, 8 añitos ya, paseo, cenita y poco más, aunque mucho mucho amor y cariño. Esta semana Yey me está cuidando muy bien, hace todo el y me da muchos mimitos, sino fuera por eso sería una semana horrorosa. El miércoles tuvimos cenita con el jefe, donde siempre claro, tortilla, gambitas al ajillo, croquetas de bacalao (que son exquisitas), una buena charla y a casa.  Al no hacer nada por el día, estos momentos los valoro enormemente, me distraen y por lo menos pasa un pelín mejor. El jueves se supone que era festivo pero el señorito tuvo que trabajar, cada día odio más este trabajo, ahora noto más la soledad (puñetera mano!!), lo bueno es que no llegó muy tarde y fuimos a por el delicioso arroz con leche que me hizo Jesús. Todo esto ayuda a que me esté poniendo como una bola, pero comer es lo único que puedo hacer sin dolor.
El fin de semana tranquilito, paseo matinal el sábado con Yey (por fin, un sábado que no trabaja!!) descubrimos un parque detrás de casa maravilloso, enorme, con un paseo a lo largo del río. Lo pasamos muy bien y luego conocimos el bar de nuestro barrio, un pub enano pero delante de casa ajajaj. El domingo tuvimos visita en casa, copitas, baile y muchas risas, un buen finde sí señor. Me hacía falta, me estaba volviendo loca en casa.
El lunes fue el día de chicas, me fui al cine con María y con Ewa. Lo bueno de aquí es que ponen las películas en versión original con subtítulos en polaco. Vimos una de miedo que nos dio más risa que otra cosa, pero sirvió para confirmar que mi inglés está en plena forma, entendí todo así que genial.
Este es el resumen de una semana más bien aburrida, con poco que contar, salvo estos detalles. Por cierto ya no tengo puntos así que a retomar la vida normal, con cuidado pero con ilusión, volviendo a estudiar y a hacer cositas, volviendo a disfrutar de esta maravillosa aventura. Un besazo a todos!!